En el pleno ordinario del mes de febrero ocurrió algo inesperado. Tanto el Partido Popular como Vox votaron a favor de la moción para limitar la apertura de establecimientos de juego y contra la ludopatía que presentó el Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Pilar de la Horada, permitiendo que esta fuera aprobada por unanimidad.
La posición de estos grupos no dejó de sorprender a los concejales socialistas, aunque la de uno más que la de los otros. El voto a favor de esta moción, que insta al Consell de la Generalitat Valenciana a revertir los cambios normativos realizados a través de la ley 7/2023 de 26 de diciembre, supone renegar de la política que el gobierno de Carlos Mazón, y en particular la formación de extrema derecha desarrollaron al principio de la legislatura sobre este asunto, reconociendo por tanto ahora la gravedad de la situación.
El propio alcalde José María Pérez y algunos concejales del Partido Popular ya habían manifestado en alguna ocasión, a preguntas del portavoz socialista Rubén Ferrándiz, su preocupación con la situación actual, que se da tras el cambio normativo impulsado por el gobierno valenciano de PP y Vox al principio de la legislatura, lo que está permitiendo la proliferación de este tipo de establecimientos como la reciente apertura de un salón de juegos en la avenida de la Torre junto al almacén municipal y otro a la entrada de Mil Palmeras en nuestro municipio, sin que los ayuntamientos puedan hacer mucho para evitarlo.
Los socialistas, que en un principio proponíamos «instar al equipo de gobierno del Ayuntamiento de Pilar de la Horadada a poner en marcha campañas de prevención de la ludopatía», aceptamos el cambio solicitado por la concejal popular Marina Sáez para que el texto pasará a decir que se continuarán estas campañas, tras exponer que ya se vienen realizando diferentes acciones desde el departamento de Servicios Sociales del ayuntamiento, así como con la participación de la Policía Local y la Guardia Civil.
Deseamos que este acuerdo plenario cuyo fin es el de proteger a nuestros vecinos y en particular a los jóvenes de la influencia negativa del juego de apuestas, que puede tener consecuencias devastadoras a largo plazo, sea un compromiso real frente a la problemática que generan estos establecimientos de juego.